Jóvenes en proceso de reinserción dan vida a primer proyecto de huerta sustentable en Las Compañías
El centro de justicia juvenil, ubicado en Las Compañías, cuenta con un área habilitada para cultivo de múltiples hortalizas, de las que ya se realizó la primera cosecha, a fin de promover la generación de hábitos y estilos de vida saludables entre los adolescentes privados de libertad.
Gracias a la iniciativa del equipo interventor del centro de Internación Provisoria y Centro de Régimen Cerrado, dependiente del Servicio de Reinserción Juvenil de Coquimbo, adolescentes y jóvenes privados de libertad dieron vida a un proyecto de huerta sustentable al interior del recinto. La iniciativa persigue distintos objetivos, entre ellos, promover un espacio de aprendizaje integral al aire libre, trabajar en la sustentabilidad y generar conciencia ambiental.
El cultivo de hortalizas contempló una etapa inicial de limpieza del terreno y trabajo de tierra, en donde los jóvenes se dividieron las labores. Lo anterior incluyó la mezcla de distintas materias, como tierra dulce, tierra de hojas y compost de residuos orgánicos, como cáscaras de verduras y frutas. Una vez llevado a cabo el proceso, se iniciaron las fases de siembra, riego y plantación de las hortalizas.
En una primera fase, se sembraron aquellas hortalizas y frutos destinados a la deshidratación y consumo inmediato, tales como tomates, pepinos dulces, cebollín, brócoli, coliflor, y tres tipos de lechugas. Luego, se incorporaron nuevas especies para cultivo, entre ellas acelga, zapallo, camote, maíz y melones.
El proyecto, que ya tuvo su primera cosecha, es liderado por la profesional a cargo y tutora, Priscila Jeldres, junto al interventor Patricio Guajardo, quien destacó la iniciativa como una experiencia satisfactoria y colaborativa: “Logramos contribuir a una práctica sustentable de producción de alimentos y utilizamos espacios que se encontraban sin uso transformándolos en espacios de distensión y zonas verdes productivas”.
En tanto, la directora del servicio en Coquimbo, Loreto Rebolledo, destacó la experiencia de la huerta: “Este tipo de instancias, que nacen de la iniciativa de los profesionales a cargo, son fundamentales, porque entregan a los jóvenes herramientas y condiciones para conseguir una reinserción que no sea momentánea, sino que perdure en el tiempo, que es el objetivo de este nuevo servicio”.
De esta forma, el proyecto impulsa a los jóvenes a desarrollar habilidades prácticas mientras aprenden sobre sostenibilidad y conciencia ambiental, generando oportunidades de crecimiento a través del trabajo en equipo.